Carlos Iglesias es íntimo amigo de Roque Mercury y, en sus ratos libres, ambos se juntan a charlar y a tomar café en el Dinos de calle Bulnes, en pleno corazón de Temuco. Mientras el primero dirige en Dimayor a Unión Deportiva Española desde hace más de una década, el segundo acaba de devolverle a la ciudad un equipo en Primera División.

Aunque los dos se formaron en la cancha, son muy diferentes. Mientras Mercury trabaja en silencio y se distingue por el bajo perfil, Iglesias motiva a los suyos bajo la arenga de su propia personalidad, enérgica y locuaz. La misma que ahora le llevó a ser suspendido por diez partidos luego del polémico partido entre su equipo y Universidad de Concepción, oportunidad en que el técnico habría sustraído la planilla, hecho que él niega.

-¿Se siente perseguido?

-Antes no lo sentía, pero esta sanción durísima me lo está diciendo en la cara. Se cometieron irregularidades en el proceso y el club estudia la apelación junto a un abogado. Pero no se engañen, a mí no me van a bajar con una sanción. Ni con cien partidos me van a sacar del básquetbol.

-¿Tiene alguna autocrítica?

-Yo sé bien que me equivoqué, pero esto es draconiano. Derechamente, me sacaron del torneo, amparados en el informe del árbitro y de un delegado del club rival. ¿Dónde se ha visto eso?

-¿Le amedrenta lo ocurrido?

-No, porque sé quiénes lo hicieron, conozco a los que están en el tribunal. Son los mismos que tienen al básquetbol chileno en el suelo. La Dimayor se cae a pedazos y espero que pronto se produzca un cambio total.

Iglesias se pone a hablar de su trayectoria y luego recalca: "No sé qué le han dado al básquetbol todos esos dirigentes de pacotilla, esos zánganos que se apegan a un articulito para actuar. Yo he formado generaciones de deportistas y entregué mi vida a esta ciudad y a Chile", expresa el técnico, quien está casado con chilena y tiene tres hijos.

-¿Cómo va a dirigir ahora?

-Desde la tribuna, claro. Y con mi ayudante de campo, Mauricio Creps, impartiendo órdenes al equipo.

-¿Prosperará su apelación?

-No lo sé. Eso espero. Si me la dejan en cinco juegos, al menos puedo volver a dirigir en el presente torneo.