Artículo de Diario Austral de OSORNO del 20021128

Última actualización: 20030507

Artículo de Diario Austral de OSORNO (digital) del 20021128

Sección Deportes

La final es una realidad

[FOTO DEL PARTIDO P.OSORNO - UDEC (COLOR)]
El juego del capitán taurino Jorge Soto fue fundaemntal para el triunfo taurino.

En uno de los dos equipos que pasará a la final de Dimayor se convirtió anoche el cuadro de Provincial Osorno, tras alcanzar la victoria ante la Universidad de Concepción, frente a un Gimnasio Monumental colmado de público.

Luego de un complicado primer tiempo, el plantel taurino logró doblarle la mano a los penquistas, quienes no dieron tregua a un aguerrido rival. Durante los primeros minutos de juego fue el capitán osornino Jorge Soto quien logró concretar en el cesto la estrategia local, aunque el adversario de la mano del alero Rodrigo Zúniga, aprovechó los descuidos defensivos de su rival, y consiguió acortar las distancias. En el segundo cuarto el estadounidence, Nathaniel Johnstone, logró apoderarse del área pintada, lo que aumentó la cuenta para los "Toros", quienes a través del juego que implementaron Galo Lara y Pablo Coro, lograron consolidar la difencia en un marcador que siempre favoreció al quinteto local.

SEGUNDO TIEMPO

En el tercer cuarto, los elencos salieron a la cancha con una leve ventaja para el equipo taurino: 42—37. Tras el descanso, el orden del equipo dirigido por Daniel Allende, demostró las falencias del cuadro penquista, quienes buscaban puntos en forma desesperada, cometiendo faltas, y perdiendo rebotes cruciales, los cuales fueron aprovechadops por Johnstone, Coro, y Soto. Finalmente, Provincial Osorno culminó este período con una ventaja de 58—53.

El último período, comenzó con un premonitorio y ensordecedor grito de la barra local. El paso a la final distaba 10 minutos. Y el excelente trabajo del refuerzo extranjero, el cual en todo momento demostró sapiencia con el balón; y la defensa (gran marca de Fernando Campos a José Luis Campos) que demotraron los aleros taurinos, culminaron con una victoria sufrida, reñida, pero totalmente merecida, por 82 puntos a 73. ¿El futuro? Enfrentarse en la final al ganador de la otra llave (al cierre de esta edición se medían Llanquihue y UDE de Temuco), a partir de éste sábado. ¿La misión? Volver a levantar el trofeo que los consagra como los mejores. La ciudad, la camiseta, y la historia, lo merecen.

Por Karla Benavides

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